A Aleya Sun le encanta ser una traviesa criada francesa. Sus clientes pagan mucho dinero para que venga y limpie con su pequeño disfraz. Pero hoy tiene una ventaja añadida cuando Sara Schwarz llega a casa y se encuentra a Aleya follándose a su viejo marido. Las dos mujeres están tan excitadas que se montan un trío salvaje.