A Eliza Thorne le gustaba el sexo. A Eliza siempre le gusta el sexo. Está casi desnuda con las tetas en las manos de su semental cuando empieza esta escena. Eliza es estrecha y menuda, y su semental tarda un minuto en mojarla y excitarla lo suficiente como para meterle toda la polla en ese dulce coño.