A Karlee Grey le encanta jugar al billar con su vecino soltero y siempre se lo pasan bien. Pero en esta partida había mucho en juego. Karlee había oído que tenía una polla gruesa, así que apostó. Para ella era un win win. Si ella ganaba, se lo follaba, y si él ganaba, ¡él se la follaba a ella! Adivina.....¡Follaron!