Annabelle y Sirale no necesitaban ni querían nada para Navidad, ¡así que Annabelle fue creativa y se puso a sí misma bajo el árbol para Sirale! ¡Le dio licencia para hacer lo que quisiera con su cuerpo! Resultó ser también un regalo para Annabelle porque Sirale le lamió y le folló el coño ¡tan bien!