Todo buen vídeo porno necesita un eslogan, y qué mejor que License To Fuck. Suena encubierto, suena misterioso, suena a agente especial. Pero, sinceramente, sólo se trata de conseguir que tías buenas se abran de piernas y entreguen sus dulces coños mientras grabamos en vídeo toda la acción de machacar labios y romper culos.